El Papa Francisco necesita «reposo absoluto» para facilitar su recuperación, por lo que no dirigirá la oración del Ángelus hoy y permanecerá ingresado en el Hospital Policlínico Agostino Gemelli de Roma el tiempo que sea necesario para tratar su bronquitis persistente, informado el Vaticano.
El pontífice pasó «tranquilo» su primera noche de ingreso por la patología que le está afectando las vías respiratorias desde hace más de una semana.
«Para facilitar su recuperación, el personal médico le ha prescrito reposo absoluto, por lo que el Santo Padre no dirigirá la oración del Ángelus del 16 de febrero, aunque ha decidido enviar el texto para su publicación», señaló ayer la Santa Sede.
El Papa, de 88 años, «descansó toda la noche» y «no presentó ningún episodio febril», mientras que «las pruebas realizadas durante el día confirmaron la infección de las vías respiratorias». «La terapia se modificó ligeramente sobre la base de nuevos hallazgos microbiológicos. Los exámenes de laboratorio de hoy constataron la mejora de algunos valores», señala el comunicado, que añade que «durante la mañana recibió la Sagrada Eucaristía, luego alternó el reposo con la oración y la lectura».
«Veremos cómo reacciona al tratamiento», señaló previamente Matteo Bruni, director de la oficina de prensa del Vaticano. «No tengo una fecha precisa (para el alta). El Papa durmió bien en el hospital el viernes por la noche y su fiebre no subió durante la noche», señaló Bruni.
El líder de la Iglesia Católica padece una bronquitis que en los últimos días le impidió desarrollar con normalidad su agenda, en tanto que le dificultaba la lectura de sus discursos y finalmente le obligó a hospitalizarse para recibir diagnósticos y los subsiguientes tratamientos médicos.
En esencia, según refieren varias fuentes recogidas por Ansa, el Papa llegó al hospital Gemelli con poco aliento a causa de dificultades respiratorias que van ligadas a un exceso de flemas.
El hospital Gemelli, el más grande de Roma, tiene una suite especial para tratar a los papas, y es conocido especialmente por haber tratado a menudo al difunto Papa Juan Pablo II durante su largo papado.
HISTORIAL DE PROBLEMAS RESPIRATORIOS
Francisco, pontífice desde 2013, tuvo gripe y otros problemas de salud varias veces en los últimos dos años. De joven desarrolló un caso de pleuresía y le extirparon parte de uno de sus pulmones, y en los últimos tiempos fue propenso a las infecciones pulmonares.
Los últimos problemas respiratorios del pontífice comenzaron a mediados de diciembre.
En enero y febrero, el Papa renunció a leer sus discursos en varios actos públicos, a los que asistió, pero en los que pidió a sus ayudantes que leyeran lo que había preparado.
Esta es la cuarta vez que el Papa tiene que ser hospitalizado en el Gemelli. En el pasado, el pontífice argentino sufrió problemas de gripe y respiratorios que incluso le obligaron a estar ingresado tres días en marzo de 2023 y en noviembre de ese mismo año estos problemas respiratorios le obligaron a cancelar su viaje a Dubái por la COP28.(RTEVE.es)