La Defensoría del Pueblo informó que el indígena Francisco Marupa, del pueblo leco, acusado de asesinato y con detención preventiva en el penal de San Pedro, no sufre vulneración de sus derechos.
Una autoridad de la Defensoría informó que “en la visita (al acusado) no se ha evidenciado una vulneración de derechos con relación a otros detenidos, además que fue valorado por el médico del penal en cuanto a su salud”.
La Red Eclesial Panamazónica en Bolivia (Repam) y otros colectivos han recibido denuncias de que el arresto ocurrió sin una investigación previa y con base en pruebas circunstanciales, mientras que el acusado no hablaría bien español.
El cuerpo sin vida de Marupa, de 67 años, fue encontrado el viernes 14 de febrero en su chaco, en la comunidad de Torehua, provincia Abel Iturralde de La Paz. Su muerte provocó el pronunciamiento de colectivos, instituciones y del presidente, Luis Arce, quien pidió una investigación para esclarecer lo sucedido.
El acusado, de 20 años, fue detenido tras ser encontrado con restos de sangre en su bote mientras participaba en una cacería con su hermano menor. El martes de la semana pasada fue trasladado a San Pedro para cumplir detención preventiva de cinco meses.
El coordinador de Repam, Willy Llanque, consideró que la Fiscalía se apresuró en responsabilizar al acusado sin agotar las investigaciones necesarias. La Defensoría aseguró que seguirá velando por el debido proceso y la protección de los derechos del acusado. (Con datos de Brújula Digital)