Las lluvias intensas golpean a Bolivia y han dejado un saldo de 229.727 familias afectadas, mientras que 45 municipios se declararon en desastre, informó ayer el viceministro de Defensa Civil, Juan Carlos Calvimontes.
“Ya son nueve departamentos afectados, el fin de semana Oruro fue golpeado con inundaciones. Hasta ahora se reportan 170.805 familias afectadas y 58.922 damnificadas”, detalló la autoridad en conferencia de prensa.
Las precipitaciones provocaron deslizamientos, mazamorras e inundaciones en 132 municipios y 2.509 comunidades del país. Además, algunas carreteras quedaron bloqueadas y varias regiones enfrentan el colapso de viviendas y cultivos.
“Tenemos 45 municipios en desastre, lo que significa que ya no tienen recursos para atender la emergencia. Muchos sufren el segundo o hasta el tercer evento climático en poco tiempo”, explicó Calvimontes.
Ante este escenario, el Gobierno nacional movilizó efectivos militares y equipos de Defensa Civil para atender la crisis. Sin embargo, los fondos asignados no serán suficientes, por lo que Calvimontes pidió a la Cámara de Senadores agilizar la aprobación de créditos internacionales que permitirán financiar la atención a los damnificados.
“Necesitamos de forma urgente la aprobación de estos créditos. Uno es de 75 millones de dólares y está destinado a atender este tipo de eventos. También está el crédito con la Corporación Andina de Fomento (CAF), cuyos fondos ingresarían al Banco Central de Bolivia (BCB) en dólares para su ejecución en bolivianos”, precisó Calvimontes.
De acuerdo con el Viceministerio de Defensa Civil, desde noviembre del pasado año las inundaciones pusieron en emergencia a cerca de 230.000 familias en todo el territorio nacional. Adelantó que equipos de rescate están realizando operaciones en varias zonas para atender emergencias.
Un total de 39 personas han perdido la vida y siete se encuentran desaparecidas, debido a la actual temporada de lluvias que ha causado inundaciones y deslizamientos de tierra en las nueve regiones de Bolivia, señala un reporte del viceministro de Defensa Civil.
De los 39 fallecidos, 3 se reportaron en La Paz, 2 en Cochabamba, 1 en Chuquisaca y 1 en Santa Cruz. La mayoría de las personas que están desaparecidas fueron arrastradas por el caudal de los ríos en distintas regiones.
El Servicio Nacional de Meteorología e Hidrología (Senamhi) emitió una alerta naranja debido a los “aportes continuos y ascensos progresivos de nivel, con posibles desbordes” en los principales ríos de las regiones altiplánicas de La Paz, Oruro y Potosí.
Mientras suman los problemas y desastres, el Senamhi en las últimas horas pidió a la población y a los gobiernos prepararse, pues las precipitaciones continuarán en el país, bajo riesgos de desbordes y otros fenómenos naturales. En algunos puntos incluso se han excedido los parámetros esperados de aguaceros.
Entretanto, las autoridades advierten que la situación puede agravarse, ya que el Servicio Nacional de Meteorología e Hidrología mantiene la alerta por lluvias en varias regiones del país. (Agencias)
En todo el país
Más de 229.000 familias afectadas y 45 municipios en desastre por lluvias
> Municipios de los nueve departamentos del país sufren inundaciones, deslizamientos y mazamorras; el Gobierno pide la aprobación de créditos internacionales para atender los desastres.
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