Buenos Aires.- Los activos de Argentina cedieron posiciones ayer ante tomas de ganancias cortas, en momentos en que una dura situación sanitaria por la pandemia de coronavirus obligó al Gobierno a endurecer las medidas de confinamiento, situación que afecta la débil economía del país en un año con elecciones legislativas de medio término.
«El Gobierno se dedicó finalmente a aplicar una dura cuarentena, pero solo por nueve días, de los cuales además solo tres son días hábiles. Este dato es relevante porque le permitió excusarse de aplicar una significativa ayuda económica a los sectores afectados», explicó la consultora Delphos Investment.
«El costo fiscal de las medidas anunciadas parece acotado y en principio no cambia nuestras proyecciones fiscales para el 2021. Recordamos que esto es importante para descartar movimientos bruscos en el tipo de cambio financiero», agregó.
Los mercados del país sudamericano permanecerán cerrados lunes y martes por un feriado puente y la conmemoración de la “Revolución de Mayo”.
Argentina registró en abril un déficit fiscal primario de 11.445 millones de pesos (unos 122,3 millones de dólares). El dato se conoció mientras que los contagios por Covid-19 avanzan por la falta de vacunación, con puertos de exportación cerealera afectados tras huelgas de diferentes sectores.
El índice S&P Merval de la bolsa de Buenos Aires bajó un 1,55%, a 56.221,87 unidades como cierre provisorio, luego de marcar un valor máximo histórico intradiario en 57.303,01 puntos en los primeros negocios. Las bajas se concentraron en acciones con cotización externa (ADRs).
Los bonos extrabursátiles perdieron un 0,6% promedio, en un marco de reducidos y selectivos negocios, donde el título referencial ‘Bonar 30’ cayó un 0,9%. El riesgo país del banco JP Morgan subía 16 unidades, a 1.535 puntos básicos hacia las 2000 GMT.
Además, las lentas tratativas del Gobierno con el Fondo Monetario Internacional (FMI) para renegociar una deuda por unos 45.000 millones de dólares y con el Club de París por otros 2.400 millones que vencen este mes, mantienen un manto de cautela a la hora de definir inversiones.
En la ronda cambiaria, el peso mayorista se depreció un tenue 0,03%, a 94,27/94,28 por dólar con regulación del banco central (BCRA). La entidad monetaria, que compró del mercado unos 50 millones de dólares, acumula en lo que va del mes adquisiciones por unos 1.850 millones de dólares.
El peso argentino en los segmentos alternativos se negoció a 162,9 unidades en el bursátil “CCL”, a 154,8 en el denominado “dólar MEP” y a 153 por dólar en el segmento marginal de cambios.
Operadores dijeron a Reuters que el BCRA viene de hacer una doble estrategia, salir a comprar bonos en la moneda estadounidense y vender de su cartera títulos en dólares contra pesos para mantener los valores de la divisa local en los mercados secundarios, con la idea de evitar que se dispare la brecha cambiaria, la que ronda en un 60%.
«Las perspectivas no son alentadoras para el segundo trimestre del 2021, ya que las restricciones de movilidad (por la pandemia) afectarán más la actividad en abril y mayo, mientras que el ritmo de vacunación no está lo suficientemente avanzado como para asumir un fuerte rebote de actividad en junio», dijo JP.Morgan en un reporte al que tuvo acceso Reuters.
Añadió que «la sorpresa alcista de la actividad del primer trimestre del 2021 se compensa así con una contracción más profunda en el segundo trimestre, por lo que mantenemos la proyección del PIB anual para el año en un 5,8%». (Reuters)