Los hombres de prensa siempre tuvieron la necesidad de sobrevivir en libertad. Esta hizo las veces de oxígeno para que continuaran acariciando la vida, por el bien común. Sin ella no hubiera sido posible informar ni orientar a la población. De ahí que el autoritarismo, no importa su tendencia política, ha representado el ocaso de la libertad de expresión, acá y acullá. Tal como ocurre, en la actualidad, en algunos países de la región.
“Uno de los temas que más preocupa y afecta a la gente de prensa es el relativo a las libertades que son inherentes a su profesión y sin las cuales sus labores y su misión no podrían desenvolverse satisfactoriamente. Si bien el periodista tiene que defender, luchando incansable y permanentemente por el respeto a la libertad de pensamiento, beneficio que, por otra parte no sólo queda reducido y enmarcado a estas peculiares tareas, sino que se proyecta sobre todo a la sociedad, también tenemos que sostener que la labor de la prensa tiene que desenvolverse sobre un concepto de absoluta responsabilidad”, sostuvo el Director de EL DIARIO, Decano de la Prensa Nacional, Jorge Carrasco Villalobos, en una disertación intitulada “Valor Moral y Espiritual de la Prensa”, ofrecida en el Seminario denominado “La Prensa en Función del Desarrollo”.
Evento propiciado por la Federación de Trabajadores de la Prensa de Bolivia y el Servicio Informativo y Cultural de los Estados Unidos (USIS). Se realizó bajo la responsabilidad del Ejecutivo del ente sindical y Robert L. Chatten, Agregado de Prensa de los Estados Unidos, en forma respectiva. Se llevó a cabo en la ciudad de La Paz, entre el 19 y 24 de septiembre de 1966. Asistieron directores y periodistas del país.
Pocos fueron los quijotes en la historia, que se desvivieron en la búsqueda de la libertad, para el ejercicio del periodismo, sin cortapisas. Elevaron su voz, con firmeza y valentía, e hicieron retroceder a sus gratuitos detractores. Ellos merecieron y merecen el reconocimiento y el homenaje de la comunidad nacional e internacional. Jamás claudicaron a sus principios éticos y morales.
Las luchas orientadas a construir una sociedad con libertad de prensa no son de reciente data sino de siempre. Sus más vigorosos exponentes sufrieron persecuciones, represalias y amenazas. Pero supieron salir adelante, enarbolando las ideas y los ideales contrarios al bozal autoritario.
El mundo político está plagado, hoy como ayer, por intereses creados, sectarios y mezquinos, donde fue proscrita la verdad y en su lugar se trata de inventar historias. Se trata de tergiversar realidades, con el único objeto de cobrar revancha. Pero quedan testimonios de la prensa independiente que contribuirán a desbaratar las mentiras y escribir el verdadero pasado de la nacionalidad boliviana.
Estas líneas fueron escritas como homenaje de respeto, de admiración y gratitud, a quienes lucharon por recuperar la libertad de prensa, sin temor alguno. ¡Honor y gloria a ellos!
En suma: la prensa libre e independiente es reflejo de un sistema de libertades. Y una prensa controlada y conculcada, es el rostro del totalitarismo.
Respeto a libertad de pensamiento
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