La Alcaldía de Oruro informó que para este sábado de peregrinación y domingo de corso del Carnaval reforzará el control con 2.500 policías de todo el país y 600 efectivos militares, luego que en el último convite, hubo consumo desmedido de bebidas alcohólicas, sin el cuidado sanitario.
El gabinete del alcalde Ademar Wilcarani concluyó, tras una reunión, que “se salió de control el consumo de bebidas alcohólicas” y no hubo apoyo de la institución del orden.
“Vamos a reforzar con 2.500 policías, que vendrán de diferentes ciudades, y 600 militares que vendrán de Huachacalla, para reforzar el control sobre el consumo de bebidas alcohólicas”, informó a la ANF, el secretario de Salud de la comuna orureña, Raúl Díaz.
Con el último convite orureño se marcó el arranque del Carnaval, como preámbulo de la fiesta central de este fin de semana. A lo largo del recorrido, según constató ANF, hubo venta de gran cantidad de cervezas y por la noche, de otros licores que eran adquiridos y compartían los asistentes, sobre todo en la plaza 10 de Febrero.
Al respecto, el secretario de Culturas de la Alcaldía de Oruro, Boris Villanueva, recordó que la organización del Carnaval 2022 está supeditada a un decreto municipal que prohíbe el expendio de licor durante el recorrido y para el evento de los días sábado y domingo, se dará cumplimiento al mismo con el refuerzo de controles.
El festejo con bebidas alcohólicas se extendió hasta la madrugada del lunes en la capital orureña. En algunos sectores del recorrido hubo desmanes y peleas, como el registrado de un ciudadano que golpeó a un músico y la lesión comprometió su vida.
Asimismo, se notó en el festival de Bandas que no se cumplió con las medidas de bioseguridad o de distanciamiento. Mucha gente sin barbijos, situación similar se observó el domingo en el último convite. (Oruro, ANF)