La Asamblea de la Alteñidad decidió ponerse en guardia por el tema de límites y activar los mecanismos de control social para que el Censo de Población y Vivienda 2022 la ubique como la primera ciudad de Bolivia en población.
A convocatoria del Comité Impulsor del Censo, miles de personas de organizaciones sociales, sindicatos y juntas vecinales se congregaron en el estadio de Villa Ingenio, para lanzar un Manifiesto que marca la ruta crítica no solamente en la coyuntura sino que proyecta un horizonte político para El Alto.
Demandaron mejoras en educación con la asignación de más ítems, en función al crecimiento de la población, a lo que se suma atención a la salud, seguridad ciudadana contra la delincuencia y la violencia contra la mujer.
Se declararon en estado de emergencia para defender sus límites jurisdiccionales demarcados de acuerdo a la Ley 2337 y advirtieron que llegarán hasta las últimas consecuencias por la restitución de su territorio con el que nació la ciudad de El Alto.
Acordaron apoyar la elaboración de su Carta Orgánica Municipal con presencia y descentralización profunda de todos sus distritos, reconstruir su pacto social y constituirse en el horizonte político y geopolítico del país.
Exigieron a las empresas públicas asentadas en El Alto, aporten al desarrollo local para garantizar la creación de nuevas empresas, a través de mejores condiciones a favor de los emprendedores productivos, micro y pequeños empresarios y el sector industrial.
Para el empresariado privado que apuesta por el desarrollo de El Alto, requerirán que de todos los niveles de Gobierno se les otorgue condiciones jurídicas, económicas y comerciales para su funcionamiento y crecimiento.
Además pidieron que los recursos del cobro de peajes por ingreso a la ciudad ingresen a las arcas del municipio o pedirán la creación de sus propios puntos de cobro.
