“Me negaron todo”, afirma Añez, tras observaciones de Misión

Luego de conocer las seis observaciones preliminares de la Misión en Bolivia de la Oficina de la Alta Comisionada de Naciones Unidas para los Derechos Humanos (Oacnudh) al juicio “golpe de Estado II”, la expresidenta Jeanine Añez afirmó que le “negaron todo” en ese proceso ordinario por el que fue condenada a 10 años de cárcel.
“Me negaron juez natural, me negaron el derecho a defenderme en libertad, a estar presente en mi propio juicio, a que declaren los que huyeron, a garantizar igualdad de partes (4 carteras de Estado contra 1 presa política), a mis pruebas de descargo. Me negaron todo”, escribió Añez en su cuenta de Twitter.
El 10 de junio, el Tribunal Primero de Sentencia Anticorrupción de La Paz condenó a Añez por hallarla culpable en la comisión de los delitos de incumplimiento de deberes y resoluciones contrarias a la Constitución y las leyes.
Al respecto, la Misión de la Oacnudh en Bolivia, que participó de las audiencias, hizo conocer sus observaciones preliminares a través de un documento. En primer lugar, advirtió que el tipo penal de incumplimiento de deberes, como han reconocido diversos mecanismos de Derechos Humanos de las Naciones Unidas, es incompatible con el principio de legalidad recogido en varios tratados de derechos humanos por ser excesivamente amplio y ambiguo.
La defensa de Añez planteó la inconstitucionalidad de ese delito, por las mismas consideraciones, pero el Tribunal Constitucional Plurinacional (TCP) rechazó su admisión y su tratamiento.
La segunda observación de la Oacnudh tiene que ver con el uso excesivo y no excepcional de la detención preventiva como medida cautelar en contra de Añez, quien fue privada de libertad desde mediados de marzo de 2021.
La Oacnudh, en su tercera observación, señaló que, con el proceso judicial llevado a cabo por el formato virtual e híbrido de las audiencias, a causa del coronavirus, tuvo impacto en los principios de publicidad e inmediación.
La cuarta observación tiene que ver con el juicio en rebeldía que se llevó a cabo en contra de exjefes militares y policiales, ya que no hubo una estrategia de defensa técnica idónea con la asistencia del servicio plurinacional de defensa pública.
El acceso a la prueba testifical de las partes fue la quinta observación de la Oacnudh, pues este pudo haber sido facilitado en mayor medida a raíz de la decisión del tribunal de no exigir la comparecencia de testigos, la misma que afectó a todas las partes en sus derechos procesales.
En abril de este año, el tribunal ordinario que juzgó a Añez rechazó 45 pruebas que presentó la defensa de la exmandataria y admitió solo seis.
La sexta observación preliminar tiene que ver con “la participación de numerosas partes acusadoras”, entre las que se encontraban la Fiscalía, Procuraduría General del Estado, el Ministerio de Gobierno y un senador, pues esta “afectó el equilibrio procesal entre otros en la posibilidad de proponer pruebas en la confrontación de testigos y en la presentación de alegatos”.