viernes, julio 26, 2024
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El camino del diablo

Las localidades de Sorata, Tipuani, Guanay y Teoponte se hallan situadas en la provincia Larecaja del departamento de La Paz-Bolivia. Actualmente hablar de Tipuani es sinónimo de oro. Otrora la comunicación de Sorata-Tipuani-Guanay y Teoponte era sumamente dificultosa y para este cometido se utilizaba un camino de herradura llamado “el camino del diablo”, posteriormente denominado “camino del oro”.

Desde principios hasta mediados del siglo pasado, se utilizaba el camino mencionado anteriormente, para comercializar quina, goma, oro y otros productos, partiendo de la ciudad de Sorata (2.678 m.s.n.m.) por una vía que se iniciaba en el cementerio de dicha población y otro que salía del hospital actual de Sorata (luego Kumuni) por Lakatia hasta el abra (paso) de los nevados Illampu (6.368 m.s.n.m.) y Janko Uma (6.427 m.s.n.m.) y de esta manera atravesar la  Cordillera Real de Los Andes bolivianos. El mencionado “abra”, lo constituía la comunidad de Ancoma (4.200 m.s.n.m.), todo este recorrido era “de subida” y se lo realizaba casi en una jornada.

En la década de 1970, este trayecto se lo podía realizar mediante un camino carretero, ayudados por un camión del alemán Ernest Mayer, marca International, resto de la Guerra del Chaco, hasta la misma localidad de Ancoma, en un tiempo de unas 5 horas, con el trayecto Sorata-Laripata-Chuchu-Ancoma, que a pie representaba una jornada. Antes de la localidad de Ancoma, existía una subida estrecha y zigzagueante llamada “el callejón” o “el tornillo”, que era aprovechada por asaltantes. Desde Ancoma se podía llegar a Tusuhuaya en cuyos alrededores la familia Bocángel tenía minas de Shellita.

Desde Tusuhuaya, el camino de herradura era todo pendiente hacia abajo, llegando y luego cruzando la “ceja de monte” (limite donde aparecen las primeras plantas), donde aparece una vegetación exuberante, en esta pendiente oriental, se cruzaba pequeñas poblaciones como Lambramani, Yavía y 2 puentes colgantes (Quilapituni y Tora), hasta arribar a Llipi, situada a orillas del río Tipuani.

Debido a la estrechez y peligrosidad del camino de herradura, las recuas estaban constituidas principalmente por mulas, siendo la primera, la que tenía una campana en el cuello, para anunciar y evitar encuentros, con las subsiguientes caídas de los animales hacia el vacío.

Desde Llipi, continuaba el camino, siendo menos dificultoso, pasando por Tuanani, hasta Unutuluni, rio Tujujahuira, cercanías de Chimajaukata (Chima), Paniagua, río Gritado y Tipuani (aproximadamente 550 m.s.n.m.). El recorrido de Sorata a Tipuani, duraba 3 a 4 días y el fiambre de los arrieros estaba constituido principalmente por “charque”, “maíz tostado” y bebidas de sultana. Era famoso el arriero denominado “Kahuapasa” que tenía una recua de hasta 30 mulas y tenía una montura adornada con láminas de plata. En la década de 1940, la “Compañia Aramayo” transportó a lomo de mula, postes y muchos materiales hasta la zona de Pisini, instalando en Gritado, una “usina eléctrica”, para favorecer la explotación aurífera del “cauce antiguo” (paleocauce), en la ribera del río Tujujahuira y la “rampa Chuquini”, con resultados exitosos. Esta labor se realizó en el Conglomerado Cangallí.

Desde la población de Tipuani, situada a orillas del río homónimo, el camino continuaba paralelo al río, hasta las cercanías de la comunidad de Cangallí. Luego se cruzaba el río Tipuani y comenzaba el camino pendiente arriba hasta el río Carguarani, para adquirir una pendiente mayor hasta el Cerro Pilón. De dicha altura, el camino continuaba pendiente abajo cruzando Polopata, Sardoncallpa para llegar a la población de Guanay (500 m.s.n.m.). El trayecto Tipuani-Guanay se realizaba en 1 a 2 días. Cabe recalcar que la población de Guanay, otrora era un centro de confinamiento y se halla en la confluencia de los ríos Mapiri y Tipuani. Desde Guanay se bajaba aguas abajo en canoas hasta la localidad de Teoponte.

A principios de la década del 60, se construyó el camino carretero de la población de Cangallí hasta Unutuluni, para motorizados pequeños. Por otra parte, se extendió el camino La Paz-Caranavi-Alcoche, hasta Puerto Ballivián, situado en la desembocadura del río Coroico en el río Kaka. A principios de la década del 70 se alargó el camino hasta Guanay, con la construcción de puentes sobre los ríos Coroico, Challana y Tipuani, sustituyendo los puentes colgantes existentes. Finalmente, el Padre Franciscano Miguel Doolling, con el Grupo O.S.C.A.R. (Obras Sociales de Caminos de Acceso Rural), construyó el camino Guanay-Tipuani.

Cabe recordar que, a principios de la década del 50, la Compañía Aramayo tenía la concesión minera de la zona de Tipuani y alrededores y realizó las labores de catastro, construcción de pistas de aterrizaje en Mapiri, Guanay y Tipuani y en vuelos de aproximadamente 30 minutos evitaba el “camino del diablo”. Con la Nacionalización de las Minas en 1952, la Compañía Aramayo dejó de realizar trabajos mineros y en su lugar aparecieron sociedades mineras y cooperativas auríferas, las cuales se dedicaron a la explotación intensiva de oro.

 

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