Temas de la vida diaria

En estos tiempos que corren es muy utilizada la frase “ni a quién quejarse”. Así se expresa el ciudadano de a pie frente a una serie de hechos que lesionan su integridad, bolsillos y hasta su salud. O sea, su rectitud, honestidad y decencia se ven afectados ante el cúmulo de situaciones anómalas por las que atraviesa en su diario desempeño en los ámbitos públicos y hasta privados; y no halla la forma de evitar que le hagan cobros indebidos o le presionen a fin de que por debajo haga circular la “coimisión”; e incluso resulta que su trajín diario carece ya de seguridad porque, en cualquier rato, gente irresponsable y badulaque hace detonar los denominados “cachorros” de dinamita que le causan desgracias, a veces serias, en su organismo. Es ahí cuando exclama “ni a quién quejarse”.
Otra frase, ya manida, que se escucha a menudo en los centros de abasto es: “así ha llegado de la fábrica”. Un rápido vistazo sirve para comprobar que casi todo subió arriba de un boliviano, hasta cinco o más, en los precios. Es el caso del detergente “Omo” de 700 gramos que costaba 16 bolivianos –ya había sufrido el alza, pues su precio era 14 Bs– ahora es 19 Bs. La bolsa de papel higiénico “Nacional” que de 32 Bs subió a 38, hoy tiene el costo de 40 Bs. La mantequilla “Regia” de 11, subió a 13 Bs, y resulta que ahora cuesta 15 bolivianos. El shampoo “Selfy” que valía 18 –ya había sido elevado a 20– tiene el precio actual de 22 Bs. El alcohol “Caimán” de 1 litro, cuyo costo de expendio era 9 Bs, fue incrementado luego a 11, pero hoy ya es 14 Bs. Sólo como ejemplo los artículos anteriores, y es menester señalar, sin embargo, que casi todo ha sufrido aumentos. Frente a ello, la trillada respuesta de los comerciantes es “así ha venido de la fábrica” y “ni a quién quejarse”. Nadie averigua si efectivamente “la fábrica subió precios”.
Pese a esa situación, bien se puede decir que la población en general le pone el hombro estoicamente al país, y por cierto, directa o indirectamente, al mismo gobierno. Por ello será menester que el Ejecutivo haga todo lo necesario para evitar el alza de precios del pan nuestro de cada día y las tarifas del transporte sindicalizado, ya que ambos sectores cuentan con subvenciones estatales.
Son, pues, temas de la vida diaria, de los cuales nos ocupamos continuamente. Y no podía faltar entre ellos los acontecimientos sociales, como los encuentros familiares, de compañeros de trabajo, o quienes hace muchos años participaron en tal o cual empresa y ahora se reencuentran para compartir algún oficio religioso y un almuerzo de camaradería. Tal es el caso de los “ex Panamericanos” que, ante el impulso de Mario García, Hugo González, Reynaldo Guerra, Emilio Saldías, Rubén Chuquimia, Javier Oros, entre otros, este sábado 23 tras muchos años volverán a juntarse. Son pues, también, temas de la vida diaria. ¡Felicidades, colegas periodistas y radialistas!